Nicholas Angel es el mejor agente de policía de todo Londres. Es tan bueno que hace que todos los demás parezcan malos. Por esa razón sus superiores le mandan a un lugar donde su talento no resulte tan embarazoso: la plácida villa de Sandford. Al ver reemplazada la frenética actividad urbana por fiestas en jardines y reuniones de vecinos, Angel trata de adaptarse a su nueva situación en compañía de su nuevo colega Danny Butterman, un alguacil un poco lerdo pero lleno de buenas intenciones. Cuando todo parecía perdido, una serie de terribles accidentes llevan a Angel a pasar a la acción. Convencido de que hay algo sucio en todo esto, empieza a darse cuenta de que Sandford puede no ser un lugar tan idílico como parece.
Una vez visto el trailer y reírme con ganas, descubrí que la película era Británica, así que no había ninguna razón para dejar escapar esta ocasión de ver una película que pintaba bastante bien. Así fue, esta comedía-acción dirigida por Edgar Wright es una historia, la cual trata la acción pero des del punto de vista mas irónico, gamberro y hasta “tonto” de la policía del pueblo mas tranquilo de toda Gran Bretaña. Nada mas empezar el film, te presentan a uno de los protagonistas, Nicholas Angel (Simon Pegg), como el mejor policía de Londres, que solo vive por el trabajo, y que es el mejor en todas las disciplinas del cuerpo, todo seguido empieza el humor “Británico”; desde el inicio del film hasta el final nos tiene enganchado ese tipo de humor, con movimientos muy rápidos de cámara que inciden mucho mas en como lo esta viviendo el personaje; ademas su compañero en la nueva población, Nick Frost (Danny Butterman) se le podría llamar “el tonto del pueblo” que solo es policía porque su padre es el inspector jefe de Sandford; pero esta población deja de ser tranquila y allí es cuando empiezan una serie de asesinatos que tiene inquieto a Nicholas y ara lo posible en toda la película para descubrir el asesino; pero todos los compañero de la comisaría son lo mas vago! y se pasan el día comiendo pastel y diciéndole que a sido un accidente y casualidad. En cuanto a los personajes les pondría una 9 de 10, todos clavan el papel, con total credibilidad, pero con toques a la vez de cierto surrealismo de pueblo británico, donde lo mas emocionante que ha pasado es un chaval que se emborracha a cervezas en el bar del pueblo... El final es tremendo, quizá algo esperado, pero con los constantes toques de humor, sales de la sala, comentando que has visto una película muy buena.
Apto: Si te gusta el humor británico
No apto: si te esperas que porque sea una película de acción esta llena de explosiones... Porque no hay nada de eso.
Considero: que es de las mejores películas britanicas de humor que he visto, con “Zombies Party” Recomendable al 100%
Edgar Vicho.